16 junho 2017

voltando às fotos

Uma fotógrafa
americana em Espanha...



«The photographs that the Hispanic Society of America directly sponsored point most clearly to the institution’s goals and preferred style. Of these perhaps none are more striking than those of Ruth Anderson (1893-1983). Born in Nebraska, she was introduced to photography by her father, Alfred Theodore Anderson, who ran a studio in Kearney. After training as a teacher, she traveled to New York and studied at the Clarence White School for Photography from which she graduated in 1919. Two years later, she began work at The Hispanic Society of America. Beginning in 1923, Anderson would travel throughout Spain to take her pictures with the aim of forming a comprehensive collection. Perhaps because the Hispanic Society already held so many images of artistic and architectural monuments, Anderson gradually devoted less attention to these. Instead, she concentrated on scenes of daily life.
Although Anderson had been taught to emphasize the picture–making aspects of her art, she subscribed enthusiastically to the Hispanic Society’s program of documentary photography. In her image of a Galician milkmaid, Anderson photographed a barefoot little girl holding a milk pail. While the image records the austerity of the child’s life, Anderson also projects an appealing sympathy for the girl. The balance of objectivity and compassion characterizes Anderson’s finest work and it is striking that even when documenting subjects of an anthropological nature, she composes the scene with a keen artistry, doubtless fostered by her training.
After 1930, Anderson’s career shifted as she now focused on the study of Spanish costume and began a productive career publishing several books and articles on the subject. Although she subsequently made one more extended photographic expedition to Spain (1948–49), it marks the last time the Hispanic Society sponsored such a campaign.»

... e uma exposição, se possí
vel, 
a não perder:
no Prado até 9.10.2017

 

12 junho 2017

No «El País» de ontem

Estilhaços do passado
atingem Associated Press


«En 1933 la oficina de Associated Press en Berlín recibió la fotografía de un reportero de Múnich en la que la policía paseaba a un empresario judío en pantalón corto por la ciudad y con un cartel antisemita colgando de su cuello. Las primeras muestras de los horrores del Holocausto empezaban a verse en las calles en imágenes como esas y el jefe de la corresponsalía guardó la instantánea en un cajón. Cuando Nueva York le pidió explicaciones, Louis P. Lochner respondió: "Aborrezco la censura, y me siento fatal por no poder informar de todo lo que sabemos", decía, pero "es más importante permanecer aquí". En el 35, bajo esa misma filosofía, AP cumplió la ley nazi y expulsó a todos los empleados judíos con los que contaban. Se habían resistido dos años.
Associated logró permanecer en Berlín hasta 1941 pese al golpe nazi a la libertad de prensa, pero no le salió gratis. Las facturas que pagó son la columna vertebral de un amplio informe que AP acaba de publicar pasando revista a todo el trabajo que hizo en la Alemania nazi: el paso de la censura a la autocensura, el silencio ante ciertos abusos del Ministerio de propaganda del III Reich o el trabajo de personajes oscuros como Franz Roth, un "ardiente nazi", conocido retratista para la SS, que trabajaba para AP.

Hay capítulos de aquel tiempo que no se habían descubierto hasta ahora. Associated puso en marcha esta investigación a raíz de un artículo que la historiadora alemana Harriet Scharnberg publicó en 2016 bajo el título La A y la P de Propaganda. Associated Press y el fotoperiodismo nazi. En él, la académica concluía que la agencia estadounidense había actuado en complicidad con el régimen para ocultar las atrocidades del nazismo, así como la exterminación de los judíos, y presentar los hechos como si fueran los propios de una guerra convencional. "AP fue la única agencia fotográfica angloamericana -con operaciones a nivel internacional- que mantuvo una subsidiaria abierta después de 1935. AP aceptó las leyes de control de prensa alemanas y por tanto se amoldó al sistema de control de la prensa de la Alemania nazi", señala Scharnberg.
Ahora, a lo largo de 163 páginas y unas cuarenta pruebas documentales, el informe de AP examina todo el período que va entre 1933 y 1945 y exculpa a la agencia de colaboracionismo. Sostiene que operó con la "mayor sinceridad e independencia posibles" pensando en la permanencia en el país como bien mayor, aunque admite que algunas situaciones "se manejaron de forma inadecuada", como cuando se calló ante ciertas manipulaciones flagrantes de sus imágenes o se contó con fotógrafos adictos al régimen.
La figura en el centro de todo este retrato es Lochner, jefe de la oficina de Berlín y en 1939 fue galardonado con el Pulitzer de corresponsalía precisamente por su trabajo sobre el régimen. "Incurrieron en ocasiones en la autocensura. En el informe se ve cómo Lochner trataba de sacar las historias, aunque al mismo tiempo trataba de no ser expulsado del país. Ese es el alambre en el que caminaba", explica por teléfono John Daniszewski, vicepresidente de AP.
El mayor hallazgo ha sido la génesis del llamado "Laux Bureau", opina Larry Heinzerling, profesor de periodismo de Columbia y subjefe de internacional de AP, ya jubilado, que ha elaborado el informe con las aportaciones de Herschaft, investigador de la agencia. En 1941, cuando EE UU entra en guerra, el ministro de Propaganda, Helmut Laux, toma el control de la oficina pero llega a un acuerdo para enviar paquetes de fotos censuradas de Alemania a AP -a través de la neutral Lisboa- y recibir a cambio fotografías de EE UU y distribuirlas entre los medios alemanes. Salvo en una ocasión, las imágenes no se alteraban, pero los pies de fotos sí se reescribían en la prensa germana para acomodarse a los intereses nazis.
"Empezamos a investigar en los archivos militares y descubrimos cosas nuevas, cómo Laux se reunió con Lochner en un tren y llegaron al acuerdo a través de la corresponsalía de Lisboa", explica Heinzerling. "También ha sido un descubrimiento toda la correspondencia entre Lochner y Nueva York, sobre qué debían hacer si se declaraba la guerra, si tendrían que cerrar o si habría una manera de seguir informando", agrega.
La historiadora Harriet Schanberg se reafirma en su investigación de 2016. "Ninguno de los resultados presentados en mi artículo están refutados por esta revisión, lo que no implica que AP haga un análisis distinto de esos resultados", señala en un comunicado enviado a EL PAÍS.
Los seis fotógrafos judíos de AP lograron escaparon al Holocausto, cinco emigraron a Estados Unidos (tres montaron su propia agencia fotográfica en Nueva York) y un sexto que fue enviado a Viena. Detenido por la Gestapo acabó sobreviviendo y trabajando como reportero gráfico en la Alemania comunista. Franz Roth, el ardiente nazi, murió en combate en 1943. Tres años antes, cuando estaban ya a punto de echarlos, Lochner escribía a la oficina de Nueva York: "Si recibo favores nunca ha sido por un intercambios de principios, sino simplemente porque he logrado vende a las autoridades que Associated Press es objetivo y neutral, y que ese es un instrumento de información pública tan poderoso que ningún gobierno puede permitirse despreciarlo".

La sombra del Reich en la
cobertura de la Guerra Civil


La influencia de la propaganda nazi también salpica la cobertura de Associated Press durante la Guerra Civil española. Hitler apoyaba a Franco y el relato que acompaña algunas de las fotografías de la agencia lo destila. El 6 de noviembre de 1936 la oficina de AP en Londres envió a a la delegación de Berlín la fotografía de una morgue tras un bombardeo lanzado por fuerzas leales a Franco con la siguiente descripción: “Madrid, 31 de octubre. Bombarderos insurgentes llevaron a cabo el peor ataque aéreo desde el comienzo de la guerra civil. En total, se perdieron 95 vidas. Las bombas cayeron en calles bulliciosas y una alcanzó a una escuela, matando a 70 niños. La foto de AP muestra la imagen de la morgue de Madrid el 31 de octubre, después de un ataque aéreo el día anterior. Esta foto fue emitida por el Ministerio de Estado de Madrid y muestra el resultado de una bombardeo aéreo rebelde en Madrid”.
La oficina de AP en Berlín distribuyó esta imagen con el siguiente texto: “Horrores de la guerra civil. Miles de víctimas inocentes han sido reclamadas por la aterradora Guerra Civil española, en la cual las fuerzas comunistas que manejan los hilos han hundido el país”.
No culpaba directamente a los republicanos de las muertes, pero omitía la autoría rebelde y atribuía la matanza a “los horrores de la Guerra Civil”, cuya responsabilidad era comunista. Cuando un periódico llamado Muenchner Neuesten Nachrichten la publicó, el pie de foto daba otra vuelta de tuerca a los hechos: “Asesinados sin misericordia por los Rojos. Esta horrible imagen muestra por sí misma a las tropas nacionales avanzando en un suburbio de Madrid. Los Rojos habían matado antes a todos los rehenes”.
Gideon Seymour, director de AP en Gran Bretaña, se quejó ante el reportero alemán Rudi Josten, de delegación berlinesa, con copia a Louis Lochner, jefe de la oficina. "Obviamente no podemos asumir la responsabilidad por la distorsión del Muenchner Neuesten Nachrichten, pero en este caso la AP GmbH por sí misma comete una falta más grave que Muenchner", dice. Lochner respondió que, según Josten, "el Ministerio de Propaganda simplemente le ordenó escribirlo".


11 junho 2017

1ª volta das legislativas francesas

32% mas maioria
absolutíssima para Macron 
e a nova etiqueta do ne0liberalismo


A peine un électeur sur deux s’est déplacé au premier tour des législatives dimanche. La participation finale à 20 heures s’élèverait à 50,2 %, selon une estimation Ipsos/Sopra Steria pour France Télévisions, Radio France LCP, RFI-France 24 et Le Point. Cela représente environ 7 points de moins qu’en 2012 (57,22 %), et surtout un niveau d’abstention record pour un tel type de scrutin.

Alors qu’elle se situait autour de 70 à 80 % entre 1958 et 1986, la participation n’a eu de cesse de chuter au premier tour des législatives depuis les années 1990. Elle se situait déjà à un niveau historiquement bas en 2012 (57,2 %).

Participation au plus bas au premier tour des législatives

0 20 40 60 80 100 195819621967196819731978198119861988199319972002200720122017 (estimation)
1958
Participation: 77,17 %
Source : Ministère de l'intérieur
Ce niveau élevé d’abstention traduit la désaffection pour les urnes d’une large partie de l’électorat. Mais il aura aussi des conséquences très directes sur les résultats du scrutin.
En effet, une faible participation limite fortement les possibilités de triangulaires ou quadrangulaires au second tour. Le mode de scrutin autorise en effet la présence de candidats arrivés en troisième position ou derrière à condition qu’ils aient réuni 12,5 % des suffrages des inscrits. A 50 % de participation environ, cela place la barre à 25 % des votes exprimés, seuil particulièrement élevé.
De même, peu de candidats pourraient être élus au premier tour dans cette configuration. Il faut en effet réunir 50 % des inscrits et 25 % des suffrages exprimés pour l’emporter sans se confronter à un deuxième tour. (Le Monde)


Para a sua tarde ou noite de domingo

Sufjan Stevens, Nico
Muhly e Bryce Dessner

em Mercury


ouvir e ver aqui

Aviso à navegação

Se os resultados das legislativas francesas forem parecidos com esta sondagem, o mais provel é ficar calado logo à noite a remoer tanta tristeza

 projecção de lugares
(mas faltará a 2ª 
volta)
sondagem Ipsos aqui